Salmón al horno
¿Necesitas un plato principal sano, fácil y elegante? Entonces el salmón al horno es tu receta. Sirve para cualquier ocasión, tanto formal como informal, es fácil de preparar, y puede ir acompañado de la guarnición que más te guste. El salmón al horno estará a la altura de cualquier ocasión.
Hoy te mostramos las formas más fáciles y sencillas de cocinar el salmón en el horno, con patatas, en papillote, en salsa, o simplemente con limón. Cualquier forma es buena para hacerlo. Prepara una de estas recetas y nunca más te preguntarás qué hacer con el salmón.
Todo lo que tendrás que hacer es untar los filetes de salmón con un poco de aceite y sazonarlos con sal y pimienta antes de meterlos en el horno. Incluso los filetes más gruesos se cocinan rápidamente, así que no te alejes demasiado del horno. Cuando el pescado empieza a escamarse fácilmente con un tenedor y la carne está opaca, ¡es hora de comer!
Y si no quieres ni encender el horno para comer un buen pescado, prueba las recetas que te propone la web Boqueronesvinagre.com, unas tapas con mucho gusto.
Receta fácil de Salmón al horno
El salmón al horno es bastante sencillo de hacer, solo debemos sazonarlo (hablaremos después de los adobos) y ponerlo en el horno el tiempo indicado.
Pero, lo que ocurre a menudo es que del salmón sale un líquido blanquecino que se solidifica con altas temperaturas y le da al pescado un aspecto muy poco apetitoso. ¿Qué es ese extraño material blanco? ¿Por qué aparece y qué puedo hacer para evitarlo?
La sustancia blanca (o albúmina) es proteína coagulada, que esta de forma natural en el salmón, no es grasa, que en mi opinión es un alivio.
La proteína comienza a coagularse (o amontonarse) una vez que está en presencia de calor, y se expulsa a través de los capas del pescado. Es inocuo, pero lamentablemente da un aspecto poco apetitoso.
Hay un truco sencillo que puede evitarlo, solo se necesitan 10 minutos, así que vale la pena probarlo.
Sumergir los filetes de salmón en agua con sal durante 10 minutos, la proporción de sal, es de 1 cucharadita de sal en 250 ml de agua. Pasados los 10 minutos, lo enjuagamos bien, secamos, y esta listo para su siguiente paso.
Aunque el salmón tiene mucho sabor, si lo adobamos o sazonamos con especias, le daremos un toque personal.
Para disfrutar de diferentes variantes de salmón al horno podemos preparar alguno de los siguientes adobos.
Picar finamente un gran manojo de eneldo y mezclar con un poco de ralladura de limón, ajo, pimienta y sal. Justo antes de que el salmón entre al horno lo rociaremos con una poco de vino blanco y aceite de oliva.
Mezclar una cucharada de jugo de limón con una cucharada de jugo de naranja, una cucharadita de perejil finamente picado y una cucharadita de menta finamente picada. Agregar una cucharadita de alcaparras finamente picadas y hojuelas de chile.
Kétchup 4 cucharadas, 1 cucharada de vinagre balsámico blanco, 1 cucharada de miel, 1 cucharadita de jengibre en polvo.
1 cucharadita de jengibre en polvo, 1 cucharadita de ajo en polvo, 75 ml de salsa de soja, 75 ml de jugo de naranja, 4 cucharadas de miel, 1 cebolla picada en trozo
Ingredientes
- 50 g de azúcar moreno.
- 1 Cucharada de miel.
- 10 cl de salsa de soja.
- 5 cl de aceite de sésamo.
- 1 Cucharadita de polvo de jengibre.
- 1 Trozo de jengibre fresco pelado y picado (2 cm).
- 2 Filetes de salmón grandes (450 g).
Pasos para la preparación
Prepare el adobo mezclando en un bol, el azúcar moreno, la miel, la salsa de soja, el aceite de sésamo, el polvo de jengibre y el jengibre picado.
Coloque los filetes de salmón en un plato y rocíe con el adobo. Cubra con papel de aluminio y refrigere durante al menos 2 horas. Saque el plato cada 30 minutos para dar la vuelta al salmón en el adobo.
Precaliente el horno a 200º. Retire el salmón del adobo y coloque los filetes en una bandeja para hornear forrada con papel de hornear o de aluminio. Hornee el salmón aproximadamente por 15-20 minutos.